Infografía: Así fueron los comienzos de Bill Gates

Es el creador de una de las empresas tecnológicas más importantes del mundo, el poseedor de una de las mayores fortunas del planeta y está interesado por la filantropía. Hoy en día, para algunos es un ángel y, para otros, un demonio. No hablamos de Larry Ellison ni de Mark Zuckerberg (aunque podríamos hacerlo). Nos referimos a Bill Gates, cuya biografía ha sido resumida en una infografía creada por el blog FundersandFounders.

Gates nació en 1955 y con 13 añitos ya estaba haciendo de hacker. Era un niño que discutía y argumentaba y sus padres lo educaron para competir. En su adolescencia ya se saltaba las clases de matemáticas para llevar a cabo su gran pasión: programar. En el instituto le acabaron prohibiendo los ordenadores por hackear, aunque, rendidos a la evidencia, al final le encargaron la creación de un programa para gestionar los horarios de los alumnos. Él mismo aprovecha esta información para apuntarse a las clases donde había más chicas. Durante estos años conoció al que en el futuro le ayudaría a fundar Microsoft: Paul Allen.

El magnate de las TIC fundó su primera startup antes de ir a la universidad. Se trataba de una empresa para medir el tráfico que no fue muy bien.

Gates fue aceptado en Harvard y en un principio consideró ser abogado, como su padre. Pero sus habilidades le llevaron por otro camino. Después de leer en una revista sobre el ordenador Altair, decidió llamar a la compañía para contarles que tiene un lenguaje para él. En principio, no lo tiene, pero rápidamente escribe uno: Basic.

Poco después abandona Harvard y funda su segunda startup. Por fin, consigue vender el lenguaje y abre Micro-Soft. Durante los primeros cinco años, Gates trabajaba en su compañía 16 horas al día. Más tarde anunciaría Windows sin haberlo creado aún y llegarían los años de éxitos y conflictos con Steve Jobs, IBM o el gobierno de EE.UU hasta que en 2008 deja de ser CEO de Microsoft, dando el testigo a su ex- compañero de cuarto Steve Ballmer, y empieza a dedicarse a labores filantrópicas. En este camino, el ingeniero ha conseguido amasar una de las mayores fortunas del mundo.

Hoy en día Gates sigue volcado en la fundación a la que él y su mujer dan nombre haciendo cosas como intentar reinventar los retretes para luchar contra la pobreza en el mundo.