6 razones por las que contratar un millennial en tu startup
Se ha hablado mucho y mal de los millennials, pero sus características son precisamente las que lo hacen perfecto para una startup.
Se ha escrito mucho sobre los millennials, la generación nacida entre principios de los 80 y principios del milenio, y en general se han dicho pocas cosas buenas. Egoístas, vagos, que viven con sus padres casi hasta que los echan, que prefieren interactuar online que en persona, etc. La pesadilla de cualquier jefe que, si esto fuera verdad, nunca contrataría a nadie nacido en esas dos décadas. ¿Estamos ante la peor generación de la historia? Una pequeña búsqueda en Internet nos dará textos de todas las épocas, desde la Antigüedad, en la que los adultos se preocupan por los jóvenes y sus actitudes. La Generación Y hará lo mismo con los siguientes dentro de unos años.
Aun así, es fácil entender por qué alguien nacido en los años 70 podría tener sus dudas a la hora de contratar a un millennial en su startup. Con todo su egoísmo y vagancia, no parecen preparados… Y, sin embargo, las cosas no son tan simples. Los millennials parecen en realidad diseñados para trabajar en un entorno tipo startup y pueden traer muchos beneficios. Estas son 6 razones por las que contratar un millennial en tu startup.
1. Se adaptan bien a los cambios. Internet ha hecho estragos con nuestra capacidad de concentración y los millennials, en muchos casos nativos digitales, son un ejemplo perfecto. Pero esta necesidad de cambiar el foco de atención cada pocos minutos puede ser también perfecta para el entorno siempre cambiante de una startup. Un trabajador de hace veinte años tendría problemas para adaptarse a los cambios constantes. Un millennial solo sobrevive en un ecosistema así.
2. Odian las jornadas fijas de 9 a 5. Las startups requieren mucho trabajo y muchas horas por parte de todos los integrantes del equipo. Alguien que necesita un horario fijo y oficial, que a las 5 de la tarde apaga el ordenador, no vale. ¿La gran ventaja de los millennials? ¡Odian las jornadas de trabajo fijas! En su búsqueda constante de independencia y libertad, prefieren jornadas flexibles, y poder trabajar desde cualquier lugar. Un millennial se llevará el trabajo a casa.
3. Necesitan misiones (y les importan más que el dinero). Otra gran ventaja de los millennials a la hora de contratarlos en una startup es que lo que les mueve no es el dinero, sino las misiones. Si consigues que crea en la startup, que comparta tu visión de que juntos podéis cambiar el mundo, aceptará que en una fase inicial no le puedas pagar un sueldo muy elevado.
4. Son buenos vendedores. La generación de las redes sociales y los selfies entiende que la imagen es clave a la hora de vender. Llevan toda la vida vendiéndose a sí mismos a través de esa imagen que moldean y transmiten en Facebook o Instagram, por lo que no suelen tener mucha dificultad para vender también otras cosas. Son nativos del marketing aunque no lo hayan estudiado.
5. Saben que el mundo es inestable. Gran parte de la Generación Y acabó los estudios y entró en el mercado laboral justo cuando la crisis económica empezaba o ya metidos en plena recesión. Aprendieron a golpes que la vida fácil que se les prometía si seguían el camino establecido (estudiar) en realidad no existía si no hacían nada. Están acostumbrados a la inestabilidad, palabra que también se conoce en las startups. Y, lo mejor, han aprendido a mantener el equilibrio.
6. Son multifunción y multitarea. Los equipos de las startups son pequeños y es siempre necesario que los integrantes se adapten bien a tareas distintas, que sepan hacer más de una cosa y, en muchos casos, que hagan varias a la vez. Los millennials han mantenido siempre todas sus opciones abiertas y entienden que es necesario saber un poco de todo. Además, con su vida de varias pantallas, trabajan mejor cuando tienen que ser multitarea.