El 60% de los españoles domicilia sus facturas del hogar

Los españoles prefieren pagar sus facturas mediante la domiciliación bancaria, tal y como lo afirman 6 de cada 10 consumidores. Según un estudio realizado por GoCardless, alrededor del 30% de los consumidores españoles se decanta por las tarjetas y el 27% preferiría las carteras digitales, como PayPal, para hacer frente a sus facturas. Para elaborar el informe, titulado “Las preferencias de pago de las compras recurrente. El consumidor de 2019”, GoCardless ha encuestado a más de 12.000 consumidores de 10 países que, en su totalidad, conforman más de dos tercios del volumen de pagos recurrentes del mundo.  

Dinamarca, Reino Unido y Alemania superan a España en cuanto a preferencia, seguidos de Francia muy de cerca. En el lado opuesto de los países que han sido encuestados, los consumidores suecos son los que menos confían en la domiciliación bancaria para pagar las facturas de sus hogares.  

Carlos González, COO de GoCardless, asegura que: “Las preferencias de pago pueden tener un gran impacto en la conversación, especialmente en las empresas con un modelo de negocio basado en la suscripción. No existe una solución “única”, pero las empresas deben entender que esta elección es crucial si quieren atraer a los consumidores. Si no ofrecen las opciones más adecuadas para los pagos recurrentes, los clientes simplemente se irán”.  

Respecto a la preferencia de pago de sus suscripciones, el 46% de los consumidores españoles prefiere aún la domiciliación bancaria. Pero no sólo los españoles confían en la domiciliación bancaria en este tipo de pagos, el 54% de los daneses y casi el 50% de los ingleses accederían a pagar mediante este método de pago.  

Al hablar de suscripciones online las cosas son distintas. El 40% de los españoles preferiría hacerlo a través de una cartera digital, frente al 37% que decidiría domiciliar el pago. Esto supone para España ser el país que más confía en este método de pago en toda Europa.  

Fuera de Europa, los estadounidenses y los canadienses prefieren el uso de la tarjeta de débito o crédito para el pago de sus suscripciones, facturas o cuotas. Y en Australia optan, normalmente, por la domiciliación bancaria, pero prefieren las tarjetas para las suscripciones.