Tan importante es tener una idea innovadora y satisfacer una demanda del mercado, como contar con el equipo y socios adecuados para hacer perdurar la compañía. El bufete de abogados RB Ruiz Beato Abogados estima que el 40% de las empresas fracasa por desavenencias entre los socios. Hay que tener en cuenta, por tanto, una serie de aspectos al elegir a tus socios empresariales o al montar una startup:
1. El valor de cada uno. No vale cualquier socio. Es importante conocer el valor que aporta cada uno de los socios, aquello en lo que va a contribuir y aquello que no le puedes pedir, sus áreas de experiencia o contactos. No todos los socios tienen que hacer lo mismo ni valer para lo mismo. Los socios tienen que aceptarse, todos tal cual son, y ser conscientes de sus virtudes y sus defectos para evitar sorpresas.
2. La confianza y la entrega. Cuando te embarcas en un proyecto asociativo tienes que aparcar los reparos que se plantean antes de embarcarse. Sin entrega no hay confianza y sin confianza no hay posibilidades de alcanzar un futuro prometedor. Si no confías en tus socios, estarás más pendiente de los fantasmas que del negocio.
3. El espíritu de sacrificio. Cualquier proyecto empresarial conlleva sacrificios, tanto personales como familiares y, a veces, empresariales. Si uno de los socios no está dispuesto a sacrificarse, no merece la pena que se embarque en algo que le va a exigir mucho, más de lo que normalmente puede dar y que va a generar recelos entre el resto de socios.
4. La capacidad de comunicación. Es fundamental que haya comunicación entre los socios, con libertad para que cada uno pueda exponer su postura con total confianza, sin miedo a que haya una ruptura. Sin dialogo o confrontación de ideas es difícil que la unión de los socios haga la fuerza y para ello hay que promover reuniones presenciales y levantar las actas correspondientes para que no queden dudas sobre las decisiones que se toman.
5. La persistencia y la creatividad. El socio tiene que evolucionar con el negocio, emprender, adaptarse al mercado, a las nuevas demandas y necesidades de los consumidores, innovar y ser creativo a la hora de hacer las cosas… Todo esto requiere de una actividad constante, continua y persistente que exige al socio ser luchador y aportar ideas nuevas y diferentes.
6. El compromiso y la responsabilidad. Sin compromiso no se va a ningún lado. Si los socios no está comprometido con el proyecto, es muy difícil que un proyecto salga adelante y más aún si ese compromiso no va unido a la responsabilidad.
7. Saber arriesgar. Un socio tiene que tomar decisiones y no es fácil hacerlo, ni eso conlleva acertar siempre. Pero quien no toma decisiones no camina y en un negocio nunca puedes estar parado. Muchas decisiones conllevan riesgos y sin riesgo uno no es empresario. Ni cualquier persona vale para arriesgarse ni cualquier riesgo es válido.
Los usuarios denunciaban que la compañía los había rastreado incluso cuando usaban el modo privado…
El Instituto Valenciano de Competitividad Empresarial financiará aquellas iniciativas que puedan solucionar incertidumbres científicas o…
Solo en el cuarto trimestre las empresas emergentes del país han levantado 1.500 millones de…
La región tiene 13 scaleups y destaca por sus empresas emergentes de salud y agrotech.
Valencia ha atraído en el primer semestre del año 30 millones de euros de inversión…
El diario estadounidense demanda a las dos compañías tecnológicas por haber usado sus contenidos para…