Adentrándonos en el ecosistema de startups manchegas

Siguiendo con nuestra serie de fotogalerías sobre las startups de las distintas comunidades autónomas, hoy llegamos a Castilla-La Mancha. Una autonomía que acoge al 1,35% del total de startups españolas. Una cifra baja pero no por ello despreciable, tanto más cuanto que en la región se están tomando en serio el impulso a las nuevas empresas con el fin de fortalecer su tejido económico y así crear y consolidar empleo. Quizás el referente sea la firma de electrónica de consumo Airis, hoy ubicada en Madrid pero nacida hace una década en Guadalajara.

Startup Explore sitúa a Castilla-La Mancha como la undécima comunidad en el ranking autonómico de startups. El ecosistema construido alrededor de las nuevas empresas tecnológicas –incubadoras, aceleradora, espacios de coworking, inversores…- no es muy extenso; situación que intentan paliar diversas iniciativas públicas y privadas.

Así, la Fundación Caja Rural Castilla-La Mancha lleva tres años con el programa para emprendedores Startup Dragons. Es un programa dirigido a emprendedores con empresas creadas que quieren mejorar los resultados de su startup, o bien afianzar sus conocimientos y los de su equipo con tutorías personalizadas.

La misma fundación ha puesto en marcha, junto a la Escuela de Organización ndustrial (EOI), Lazarus, una aceleradora privada ideada por un grupo de emprendedores expertos en el lanzamiento y la consolidación de startups.

Desde el Gobierno de Castilla-La Mancha, por su parte, cuentan con el Plan Adelante 2016-2019 como estrategia de fortalecimiento empresarial de la región. El Plan Adelante busca que se creen nuevas empresas y que se fortalezcan las que están en funcionamiento, con especial hincapié en la innovación, la comercialización y la internacionalización, así como en mejorar su acceso a la financiación.

Asimismo, existen iniciativas más flexibles como Goban, la Red de Business Angels de CLM, que funciona como un punto de encuentro entre inversores y emprendedores, con eventos en Toledo, Ciudad Real, Albacete y Guadalajara.

La actividad de startups está bastante repartida en cuanto a geografía y sectores. Hay nuevas empresas castellanomanchegas dedicadas al ecommerce, los servicios a empresas, las apps móviles y los servicios para la agricultura y ganadería.

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