El fotógrafo y a la vez protagonista en la foto además de los rayos es Chris Kotsiopoulos. La foto en sí es en realidad una secuencia de 42 fotos tomadas con una velocidad de obturador de 3,2 segundos, valor de apertura de 4 e ISO 100 con una cámara Canon EOS 550D y un objetivo Canon EF 15mm f/2,8.
Las fotos fueron tomadas en el estadio olímpico de Atenas en la madrugada del 28 de junio de este año y tardó aproximadamente 30 minutos en conseguir retratar hasta 51 rayos.
Obviamente el rayo no le da en la cabeza, pero probablemente si hubiera una foto de frente se vería como se había meado en los pantalones tras presenciar una rayo tan enorme caer unos cuantos metros delante de él.— Dani Burón [Greek Sky]
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