Airbnb intenta reconciliarse con Barcelona

No parece que la situación de Airbnb en Barcelona esté camino de arreglarse. La plataforma de home-sharing ha planteado en una carta al ayuntamiento de la Ciudad Condal una serie de medidas destinadas a suavizar la disputa que mantienen y que ya le ha costado a la empresa con base en San Francisco varias sanciones y la retirada de anuncios.

Airbnb ha presentado un catálogo de iniciativas, entre las que están el poner límite al número de alquileres por anfitrión en la Ciutat Vella: cada persona podrá arrendar sólo una casa o apartamento dentro de los límites de esta zona. La plataforma se compromete, además, a recoger las quejas de los vecinos de los alojamientos ofertados y ponerlas en conocimiento de los anfitriones, para mejorar la relación entre las partes.

Airbnb ha planteado, por último, que se debería desarrollar una normativa más clara sobre la tasa turística, comprometiéndose a colaborar con las autoridades para asegurar su pago. “Airbnb quiere discutir esas ideas con los responsables de gobierno en Barcelona y Cataluña”, ha dicho la empresa en un comunicado que recoge Reuters.

La reacción del consistorio no se ha hecho esperar. El concejal de Empresa y Turismo, Agustí Colom, ha tachado el anuncio de “tomadura de pelo”, el mismo término que ha empleado la portavoz de Urbanismo, Susana Suárez. En palabras de Colom, Airbnb “se equivoca una vez más”, destacando que “el único acuerdo posible con Airbnb es que la plataforma se avenga a cumplir con una normativa que en nuestra ciudad es muy clara”. Sobre las medidas propuestas, el concejal ha declarado que es irrelevante que se limite el número de pisos por anfitrión, ya que no pueden permitirse “ni uno ni 25 ilegales”. Colom ha explicado que la corporación mantiene el diálogo abierto con Airbnb, por lo que el anuncio no es una sorpresa, aunque sí ha dicho que no aporta nada nuevo.