Ayer martes, la Asociación Española de Startups organizó en la sede de Facebook España en Madrid un debate electoral con representantes de los cuatro grandes partidos políticos españoles. En él se debatieron sus propuestas para las startups y las nuevas formas de empleo que generan.
Los cuatro miembros de PP, Podemos, PSOE y Ciudadanos debatieron con representantes de startups españolas como Cabify, Tutellus, Chefly o delSuper, sobre sus políticas relativas a la innovación, el empleo y la economía colaborativa. Asimismo, escucharon las historias y problemas de la comunidad de startups españolas.
Segundo González, representante de Podemos, señaló la necesidad de crear un modelo basado en inversión pública que garantice los derechos laborales. Frente a los importantes vacíos legales existentes que crean conflicto al regular ciertos asuntos, como la economía colaborativa, Podemos busca modelos de consenso con los negocios tradicionales.
Para Manuel de la Rocha Vázquez, del PSOE, su propuesta pasa por facilitar, conectar y financiar. Es decir, eliminar trabas y burocracias, crear un ecosistema fuerte y facilitar sistemas de inversión tanto privados como públicos.
Toni Roldán, de Ciudadanos, anunció que su partido ya ha presentado una proposición no de ley sobre startups. Su programa pasa por reconocer las especificidades de las startups, dinamizar el mercado laboral, eliminar burocracias y trabas en las instituciones y apostar por la educación.
Por su parte, Álvaro Ballarín, del PP, declaró que las startups tienen una relación inevitable con la productividad, que está siendo uno de los problemas en España. Para Ballarín, España crecerá gracias a la innovación y las startups, no con las grandes empresas.
Más allá de los diferentes puntos de vista, hubo acuerdo entre los cuatro representantes políticos en la importancia de las startups para crear un cambio positivo en la economía española. Todos los partidos apuestan por una reforma de la figura del autónomo, con distintas soluciones: ampliación de la tarifa plana, cuota según ingresos o exención hasta una cantidad de beneficios mínima (SMI o cantidad anual).
Por parte de los emprendedores, hubo un mensaje claro: no queremos más subvenciones sino menos trabas administrativas, fiscales y laborales. Paola García, de Chefly, llamó la atención sobre la existencia y potencialidad de la figura del microemprendedor y el autónomo no habitual, que no está regulada y que encuentra muy difícil ser aceptado por la Administración.
Desde Tutellus, Miguel Caballero recordó la importancia de la segunda oportunidad, ya que pocos “startuperos” tienen éxito en la primera oportunidad y pocas de las medidas de apoyo al emprendimiento ayudan a estos empresarios que lo intentan por segunda o tercera vez.
Ante el consenso de los partidos en la necesidad de apoyar a las startups, la Asociación Española de Startups se ofreció como interlocutor para elaborar planes y medidas que puedan mejorar la capacidad de las startups de generar empleo y riqueza, en economía colaborativa, fiscalidad y modernización de la Administración.
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