Apple trabaja en algo grande, según su gasto en I+D
¿A qué está dedicando Apple su presupuesto de más de 2.000 millones de dólares al trimestre en esta área? Neyl Cybart apunta a baterías para coches eléctricos o a coches autónomos.
La compañía de Cupertino lleva incrementando su gasto en I+D desde 1998 y en los últimos 38 trimestres solo se han producido seis caídas en el mismo. Actualmente cada cuarto económico Apple gasta más de 2.000 millones de dólares en esta área, una cantidad significativamente alta. ¿Tienen algo grande entre manos Tim Cook, Jony Ive y los suyos? ¿Están desarrollando una nueva unidad de negocio? El analista financiero Neyl Cybart asegura en su web Above Avalon que así es.
“A partir del verano pasado, el gasto de Apple en Investigación + Desarrollo ha crecido 500 millones de dólares en relación al año anterior. Este ritmo es a partir de los entre 200 y 300 millones de aumento trimestral durante la fase de desarrollo del Apple Watch”, explica Cybart.
Para poner los números en perspectiva hay que recordar que en su día, cuando estaba desarrollando el iPhone, la compañía de la manzana invirtió en investigación para el teléfono unos 150 millones de dólares. Así, Cybart cree que “estamos viendo las primeras etapas de Apple comenzando a añadir talento y procesos para futuras iniciativas de transporte personal”.
El analista apunta hacia dos direcciones, ambas relacionadas con el segmento de los vehículos. En primer lugar, especula con la creación de un coche eléctrico con la impronta de la manzana mordida y el desarrollo de una “división de baterías a gran escala” para dotar a estos vehículos de la suficiente autonomía como para ser tomados en serio a nivel comercial. El verano pasado Apple contrató a un equipo de expertos de A123 Systems para investigar en esta área y parece estar fichando a gente de Tesla.
Además, Cybart también piensa que el desmesurado presupuesto actual en I+D también se estaría destinando a un coche autónomo. “Mientras que se necesitará a un conductor durante años, el software inicial y la tecnología que se puede poner en un automóvil para evitar accidentes es suficiente como para justificar el gasto y la investigación de las características más autónomas”, añade.
Por último, el experto económico subraya que el ritmo de 10.000 millones de dólares de gasto anual en I+D es un indicador de que la dirección está tratando de ir más allá de los teléfonos, los tablets y los relojes “en una búsqueda para encontrar otra industria en la que Apple pueda aportar frescura” o en la que sea capaz de sorprender a los consumidores con algo nuevo.