Parece broma pero no lo es: Heinz está trabajando en el microondas más pequeño del mundo. Se llama Beanzawave, mide 18,7 cm de alto y 6,6 cm de ancho, por 15 cm de profundidad. Se alimenta del PC vía USB, o bien de sus baterías de ión litio. Tanto esta imagen como su nombre señalan su objetivo preferente: las judías pintas. ¿Será porque Heinz vende frijoles en minilata? ¿Qué pasa si ponemos fabada asturiana en su lugar? ¿O los maravillosos noddles? En fin, aún no es un producto comercial, pero si la respuesta a la idea es positiva, lo venderán por 160 dólares. — Rafa M. Claudín [Fast Company]
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