Bienvenido, míster Google

La corporación californiana Google parece haberse convertido en uno de los grandes enemigos de la Unión Europea (UE), que mantiene varios litigios con la compañía a cuenta de la elusión fiscal, la política de privacidad y las prácticas monopolísticas de la misma.

Sin embargo, o precisamente por eso, Google está suponiendo un verdadero maná para diversos sectores de la economía europea. Desde las oficinas de startups europeas a conciertos de música y exposiciones de arte, pasando por cursos de formación, el gigante de las búsquedas tiene previsto gastar alrededor de 450 millones de dólares entre 2015 y 2017.

De acuerdo con una información del New York Times, la compañía está invirtiendo dinero en patrocinios de amplio alcance, como una exposición en un museo belga sobre la realidad virtual, un fondo para ayudar a los editores de noticias europeos a elevar su inteligencia web, un curso de formación digital para profesores irlandeses y conciertos emitidos por YouTube.

El diario neoyorquino apunta que Google ha estado intensificando sus inversiones para apoyar la cultura y la educación en el Viejo Continente con el objetivo de ganarse el favor de las autoridades europeas, en un contexto en que los reguladores de la UE no apartan su mirada del gigante de las búsquedas.

Este gasto representa una campaña de “presión suave”. Además de contar con grupos de presión para defender sus intereses en los pasillos de Bruselas, la empresa busca cambiar la percepción del público europeo en general. Su esfuerzo para patrocinar la capacitación digital, exposiciones y otros programas es una estrategia sin precedentes entre las compañías de tecnología estadounidenses y tiene el fin de seducir a ls ciudadanos europeos que todavía ven Google como un intruso americano que no respeta las reglas de la UE.