Bruselas aumenta la seguridad de los niños en la Red
Las líneas de acción del proyecto Safer Internet Plus son la lucha
contra los contenidos ilícitos y el tratamiento de los asuntos no
deseados y perjudiciales.
La Comisión Europea ha propuesto la adopción de un programa destinado a
combatir los contenidos ilícitos y perjudiciales en Internet para que
este medio sea más seguro para los niños. Así, el proyecto Safer
Internet Plus (Internet más Seguro Plus), que contará con un
presupuesto de 50 millones de euros para los próximos cuatro años,
pretende profundizar los trabajos realizados por la Unión Europea (UE)
desde 1996 en este campo.
Las líneas de acción de la iniciativa
son la lucha contra los contenidos ilícitos, el tratamiento de los
asuntos no deseados y perjudiciales, incluido el spam, y la promoción de
un entorno más seguro. Junto a esto, el objetivo del programa es
aumentar la seguridad en los nuevos medios y centrar su atención en
padres, educadores y niños.
En este sentido, el 46 por
ciento de los niños del norte de Europa que usan Internet para charlar
señalan que alguien ha intentado usar esta vía para fijar una cita con
ellos, mientras el 14 por ciento reconocen que se han encontrado con
alguien por esta alternativa.
Por su parte, el comisario europeo
de Sociedad de la Información, Erkki Liikanen, ha señalado que los
niños deberían tener el derecho de usar Internet libremente, para
charlar, aprender o jugar, pero para ello hay que protegerles de los
riesgos de explotación o de abuso por parte de adultos.
Para luchar contra los contenidos ilícitos se promoverá la existencia de las
llamadas líneas directas, que permiten a los usuarios señalar la
existencia de este tipo de cuestiones y transmitirla a los organismos
que puede actuar contra ellos.
El programa también financiará el
desarrollo de medidas técnicas que permitan al usuario limitar el
volumen de contenidos no deseados que recibe, así como para evaluar la
eficacia de las actuales tecnologías de filtro y desarrollar otras
nuevas.
De igual forma, se quiere lograr que Internet sea un
entorno más seguro, para lo que el Ejecutivo comunitario pondrá a
disposición de los organismos nacionales de regulación conjunta o de
autorregulación una plataforma que permitirá intercambiar experiencias.