Más concretamente, como inspiración han usado al escorpión de cola gorda (Androctonus australis), que cuenta con un veneno mortal y que vive en los desiertos del norte de África y Oriente Medio.
El equipo de investigación de la Universidad Jilin escaneó la superficie de los mismos y comprobó que cuentan con microtexturas con bultos y huecos que canalizan el aire con partículas de arena, de manera que su efecto de abrasión es mucho menor.
Contando con esta bioestructura realizaron una serie de pruebas con diferentes tipos llegando a la conclusión de que la que resultaba mejor era aquella en la que los huecos se disponían en un ángulo de 30º con respecto a la dirección del aire.
Claro que esto sólo permite resistir al ataque directo de la arena y no a sus efectos perniciosos por acumulación, pero al facilitar que la arena “fluya” a través de la superficie se consigue también que se acumule menos.
Bueno, mejor que nada es, aunque muy probablemente su función será lamentablemente militar. Tan sólo esperemos que no se animen con los escorpiones y no empiecen a crear también una hermandad Nod. [Languimir]
Los usuarios denunciaban que la compañía los había rastreado incluso cuando usaban el modo privado…
El Instituto Valenciano de Competitividad Empresarial financiará aquellas iniciativas que puedan solucionar incertidumbres científicas o…
Solo en el cuarto trimestre las empresas emergentes del país han levantado 1.500 millones de…
La región tiene 13 scaleups y destaca por sus empresas emergentes de salud y agrotech.
Valencia ha atraído en el primer semestre del año 30 millones de euros de inversión…
El diario estadounidense demanda a las dos compañías tecnológicas por haber usado sus contenidos para…