Los ciberdelincuentes también aman Panamá
Sociedades offshore de Panamá, las Islas Vírgenes Británicas y la República Dominicana son empleadas para ocultar los beneficios económicos de la ciberdelincuencia.
Últimamente se habla mucho de los Papeles de Panamá. Los documentos revelados del bufete de abogados panameño Mossack Fonseca mostraron que políticos, empresarios y personalidades de todo el mundo estaban usando compañías offshore para evadir el pago de impuestos. Pero, ¿son los paraísos fiscales usados también por los ciberdelincuentes?
Según la investigación de Trend Micro, la respuesta es sí. Sociedades offshore de Panamá, las Islas Vírgenes Británicas y la República Dominicana se anuncian en foros clandestinos y son empleadas para ocultar los beneficios económicos de la ciberdelincuencia.
Estas compañías que ocultan fondos a las autoridades, en principio para mantenerlos a salvo del Fisco, son muy útiles también para los cibercriminales que usan servicios de lavado de dinero para mover fondos sin levantar alertas.
Un vistazo rápido a las comunidades clandestinas en Internet revela la existencia de varios anuncios que promueven el lavado de dinero en paraísos fiscales. Varios miembros de estos foros ofrecen servicios opacos para establecer empresas ficticias. Ellos establecen una empresa falsa para el cliente, que tendrá un representante nombrado como responsable de la misma y se encargará de todas las cuentas bancarias, trámites de apertura.
Como parte de esta oferta, el cliente firma un acuerdo de “confianza” especificando que el propietario nominal no tiene el control de los activos de la empresa offshore. Se registra un conjunto de cuentas bancarias en el paraíso fiscal para procesar cualquier fondo y se llevan a cabo transacciones monetarias falsas en estas cuentas para demostrar que la compañía está activa.
Asimismo, el cliente recibe un conjunto de tarjetas de crédito vinculadas a las cuentas bancarias y un pasaporte WebMoney (WM), que se une en la cartera a las tarjetas. WM es una forma muy popular entre los ciberdelincuentes para mover el dinero.
Al comparar las ofertas de cuentas offshore con los simples servicios de lavado de dinero, encontramos grandes diferencias. Estos últimos ofrecen servicios de intercambio de moneda, así como comprar, almacenar y vender. En cambio, la mayoría de los servicios offshoring, o de deslocalización, parecen utilizar empresas ubicadas en Panamá, las Islas Vírgenes Británicas y la República Dominicana. Todo apunta a que estos tres países son los destinos internacionales más demandados por la comunidad criminal cibernética.
Aunque los pequeños usuarios no suelen necesitar estos servicios y utilizan otros servicios de lavado de dinero más sencillos, está claro que algunos ciberdelincuentes también son titulares de cuentas en paraísos fiscales.