Coches como dispositivos móviles: cuando Internet llegó a las carreteras
Los coches conectados son ya una de las prioridades de los principales fabricantes, que ven 2014 como el año en que serán adoptados pro fin por el consumidor.
Lo de los coches conectados a Internet es algo que ya dejó de ser un sueño de ciencia ficción hace bastante, pero su presencia en las carreteras es todavía escasa. Hasta este año: todo parece indicar que 2014 será el punto de inflexión, el año en el que todos los fabricantes de automóviles se vuelquen ya no en potencia o en diseño, sino en temas de los que hasta ahora no se hablaba en el sector de la automoción. Internet, sistemas operativos, pantallas táctiles, procesadores.
Las dos ferias tecnológicas que tienen lugar a principios de año y que marcan cuáles serán las tendencias principales que marcarán el mercado en los próximos meses, el CES de Las Vegas y el Mobile World Congress de Barcelona, lo dejaron claro: los coches ya no están solo en los salones del automóvil. Los coches son ya un elemento más de electrónica de consumo, son dispositivos móviles en todo su derecho. Los coches son los nuevos smartphones.
Como ya pasó en el mundo de los teléfonos móviles, una nueva guerra empieza también a fraguarse, la de los sistemas operativos. De momento va ganando Blackberry, que con su QNX es imprescindible para el CarPlay de Apple, por ejemplo, y que se rumorea que Ford podría adoptar para su plataforma Sync, dejando de lado a Microsoft, sus partners actuales. Además, QNX cuenta con el favor de Audi, BMW, General Motors, Mercedes y Toyota, entre muchos otros.
¿Qué hacen estos coches conectados? De momento, en estos pasos iniciales en los que todo es todavía bastante básico, ofrecen conexión a Internet (ya sea a través del smartphone o con una SIM propia) y la posiblidad de controlar muchos temas de forma remota: encender el coche o su calefacción desde el smartphone, abrirlo o cerrarlo, etc. En sus pantallas táctiles, además, se puede desde buscar radios online hasta lanzar Google Maps, además de navegar por la web o consultar el mail.
El reto está en esos pasos más allá que de momento se quedan en prototipos o en modelos muy específicos: esas apps que permiten aparcar el coche de forma remota, las que permiten buscar y pagar el aparcamiento desde el vehículo (para esto, claro está, hacen falta una infraestructura y unos acuerdos extra), todos los sistemas de información de vehículo a vehículo que alertan de problemas de tráfico, etc.
¿Qué coches y sistemas se están presentando? Estos son algunos de los vehículos conectados que están ya en el mercado, que saldrán este año o que marcan cómo será el futuro de la automoción.
[nggallery template=nme images=40 id=70]