Cómo desarrollar tu propia página Web
Crear una nueva Web requiere un proceso y no es tan sencillo como mucha gente piensa. Sin embargo, para proyectos con necesidades estándar podemos recurrir a servicios Online para el desarrollo de Webs en base a plantillas, y sin apenas conocimientos técnicos. [Publirreportaje]
Montar una página Web es una tarea relativamente sencilla sobre el papel, pero en la práctica requiere una serie de procesos y tareas que marcarán el resultado final. Si estás pensando en crear una a continuación te marcamos algunos aspectos claves que tendrás que tener en cuenta, y que marcarán las posibilidades de éxito de la Web. Además, veremos algunas recomendaciones y consejos para llevar el proyecto a buen término:
1) El dominio importa: Un punto que merece toda nuestra atención, antes de que siquiera pensemos en los contenidos que tendrá la página, es el nombre mediante el cual nuestra página será accesible. Hay que tener presente que el nombre de dominio es un factor decisivo para posicionar la página en los buscadores como Google, al tiempo que es el punto de entrada que usarán los clientes o visitantes interesados en ella.
Si somos una nueva empresa y aún no tenemos marca, hay que comprobar en Internet si nuestro dominio está ocupado. Y en caso de que lo esté, o nos replanteamos la marca, o tendremos que añadir alguna palabra a nuestro dominio que permita que nuestros clientes se acuerden de él (p.ej. mimarca-eventos.com), pero sin ser tan largo o complejo de escribir que les pongamos difícil llegar hasta nosotros.
Por otra parte, es muy poco recomendable tener como dominio principal un dominio que incluya una zona geográfica concreta (mimarca-madrid.com), pues restringirá mucho nuestro negocio de cara al futuro. Esta clase de dominios es muy interesante tenerlos en ciertos negocios de cara al posicionamiento, pero no como dominios principales de nuestra página.
2) Alojamiento Web: Ya hablamos en otro artículo sobre los aspectos a tener en cuenta a la hora de elegir un servicio de hosting y cuáles son las características más importantes a valorar. Por tanto no vamos a deternos en ello ahora, aunque como indicábamos en el artículo anterior, es importante no caer en la tentación de servicios extremadamente baratos y poco potentes. Es preferible pagar un poco más, y estar en manos de algún proveedor grande con buen soporte técnico.
3) Objetivos de la Web: Esto puede parecer una obviedad, pero es importante sentarse a pensar detenidamente para qué vamos a montar una Web. Esto, además, nos simplificará las cosas en el proceso de desarrollo de la misma, pues tendremos bastante claro que será exactamente lo que vamos a necesitar.
En este punto pensaremos si el objetivo principal de la Web es mostrar información sobre nuestros productos, vender productos/servicios o simplemente servir de repositorio de información. Igualmente podemos pensar en micro-objetivos como “Que las visitas dejen sus datos y se suscriban a la newsletter“, “Que vean vídeos de nuestra compañía“, o que “Usen el área privada para comunicar sus incidencias“.
Son sólo algunos ejemplos, pero estos micro-objetivos apoyan al objetivo principal, y son una buena manera de tener claro que tipo de secciones, contenidos o desarrollos especiales tendrá que tener nuestra futura Web.
4) ¿Cómo desarrollamos la Web?: Aquí no os vamos a engañar. Si necesitamos montar una Web que deba cubrir unos objetivos muy ambiciosos o con funcionalidades que no sean estándar, lo más probable es que necesitemos ayuda profesional por parte una empresa de desarrollo o agencia de marketing específicamente centrada en el desarrollo de Web. Es un mundo altamente competitivo donde es posible que tengamos competidores que llevan mucho tiempo y mucho dinero invertido.
Ahora bien, si buscamos empezar con una Web sencilla, sin grandes necesidades y que cubra unas necesidades básicas hay opciones realmente interesantes a costes muy reducidos. De hecho, si tenemos un negocio pequeño o mediano y la Web actúa fundamentalmente como escaparate de nuestra actividad, o un lugar donde nuestros clientes pueden encontrar los datos de contacto e informarse de manera esporádica sobre nuestros servicios, lo más posible es que nos resulte muy poco rentable contratar a una empresa de desarrollo Web. Nos costará unos cuantos cientos de euros tener una Web estándar que podríamos conseguir de otra forma.
Para estos casos, igual que si sólo buscamos montar una Web personal, hoy día podemos encontrar muchos servicios en Internet que nos permiten crear Webs personalizadas a partir de diferentes plantillas sobre las que iremos trabajando para añadir nuestros contenidos. Estos contenidos los cargamos desde el mismo navegador Web, a través de una interfaz muy fácil de manejar sobre la que iremos cargando nuestro logo, nuestras imágenes, secciones y los textos de las diferentes partes de la Web. El resultado final, dependiendo del servicio, suele tener un nivel mínimo de calidad si hemos trabajado adecuadamente las imágenes, quizá el punto más delicado de cualquier página.
Un buen ejemplo de este último punto lo tenemos en el proveedor 1&1, que cuenta con un producto específico para el desarrollo de páginas Web sin apenas conocimientos técnicos. Se trata de 1&1 Mi Web, que se ofrece en tres modalidades: Básico, Avanzado y Premium, y con precios que van desde 1 €/mes hasta los 10€/mes. En dicho precio se incluye el dominio, el hosting de la Web y hasta 200 cuentas de correo electrónico para nuestro negocio. Y entre las funcionalidades, a partir del servicio Avanzado contamos con sistemas para subida de archivos PDF/DOC/PPT de manera sencilla, calendario de eventos de fácil actualización, funciones de integración con redes sociales, versiones móvil/PC de la misma página, herramienta para newsletter de cliente, y todo lo que atañe al posicionamiento y optimización de la Web en buscadores.
Sin embargo, la estrella del producto 1&1 Mi Web es, sin duda, el editor Web que nos permite crear nuestro sitio de manera sencilla y con opciones muy intuitivas. La base está en los diseños disponibles (totalmente personalizables), donde podemos encontrar varias docenas entre las que elegir con distintas distribuciones, colores de fondo, tamaños de cabeceras, etc.
Es más, una vez seleccionada la plantilla que más se ajuste a lo que tenemos en mente, las posibilidades son inmensas. Para empezar tendremos un asistente que nos irá guiando en todos los puntos importantes, para que no nos dejemos nada al azar (títulos, colores, estructura, etc.). Luego podremos gestionar las diferentes páginas que compongan nuestra Web con sólo arrastrar y soltar. Además, se nos ofrecen esquemas adaptados al diseño elegido para las más típicas (Quienes somos, Galería de fotos, Noticias, Ubicación, etc.). De esta forma, no tendremos que complicarnos mucho para lograr mostrar lo que buscamos. Por último, tenemos la oportunidad de insertar elementos de todo tipo: desde imágenes y vídeos, hasta tablas, botones sociales, llamadas a la acción de toda clase, descargas, etc. Y si tenemos ciertos conocimientos técnicos, el servicio permite incluso modificar los HTML/CSS para ajustar el diseño o los elementos mostrados hasta el mínimo detalle.
Con todo lo anterior ha de quedarnos claro que para que una Web funcione ha de contar con un buen dominio, un hosting rápido y de calidad, unos objetivos claros que nos permitan desarrollar una Web que cubra las necesidades o expectativas de nuestras visitas y, sobre todo, tener un diseño y estructura agradable y usable. Este último punto, que suele ser uno de los más complicados de resolver para personas no técnicas, hoy día puede ser abordado con facilidad y a un coste ajustado gracias a servicios como el de Mi Web de 1&1 que hemos explicado. No es el único del mercado, pero probablemente sí uno de los más potentes y sencillos, así como con mejor relación coste/prestaciones.
