¿Cómo funciona la Campus? La seguridad

Nada más llegar, al ser mi primera Campus me preguntaba como demonios controlaban que los equipos no desaparecieran misteriosamente, ya que por mucho que queramos no podemos estar 24 horas delante del ordenador.

El sistema de seguridad se basa en sí en dos cosas: la primera es la confianza, ya que normalmente al tener un puesto fijo, la gente a tu alrededor te conoce y hablando con ellos podéis estar pendientes unos de otros.

La segunda es unas pegatinas que se colocan en las torres, pantallas y portátiles con vuestro DNI, cada vez que sales de cualquier sitio te piden que abras la mochila y enseñes tus equipos. Pero también es cierto que con un secador, o poniendo otro DNI en una pegatina blanca sobre la pegatina oficial, con lo rápido que van es fácil pasar con lo que queráis.

También es verdad que en algunas partes no hacen los registros, sobre todo en la zona de camping donde los equipos portátiles quizás corran el mayor peligro ya que no puedes llevártelos a la ducha, por ejemplo.

También cada vez que entras o sales de un recinto tienes que pasar un control donde no sólo comprueban los equipos que llevas, sino también alguno de los objetos prohibidos: alcohol, recipientes de vidrio y, lógicamente, armas.

Si estás en un sólo sitio y no das muchas vueltas la verdad es que es genial, pero si estás pasando continuamente a edificios y zonas diferentes, es un tostón ir pasando por cada uno.

De todas maneras el fin de semana y al final de la Campus es cuando más problemas se producen, aunque muchos campuseros aseguran que es algo muy puntual, quizás un par de robos entre los más de 4.000 asistentes.