Cómo ser más productivo trabajando desde casa
Cuidar el ambiente, poner música, no caer en la multitarea o darse un paseo de vez en cuando ayudan a minimizar las distracciones y elevar la productividad.
Ya hemos hablado en alguna ocasión de que tener la oficina en casa puede ser una bendición o una maldición. A las indudables ventajas de comodidad y ahorro de tiempo y dinero en transporte se oponen las trabas para ser productivo en casa. Cuando nadie te está mirando y tienes acceso a un gran número de distracciones, es fácil dejarse llevar. Si quieres ser realmente productivo trabajando desde el hogar, estos 4 consejos son esenciales:
1. No realizar múltiples tareas. A pesar de ser un icono del trabajo posmoderno, la multitarea es realmente una pesadilla para la productividad. Puede reducir la productividad hasta en un 40%, además de aumentar la tensión y disminuir el disfrute del tiempo libre. Por el contrario, si te obligas a tí mismo a resistir desvíos innecesarios, disfrutarás de una mayor concentración y motivación para las tareas que realmente te importan. Una forma fácil de evitar la multitarea es silenciar el teléfono y reducir las consultas al correo electrónico.
2. Invertir en equipo. Si eres un profesional tecnológico, es muy posible que ya hayas cubierto este paso. Para los demás, no hay que subestimar la importancia de los equipos. Aparte de un buen equipo de escritorio, vale la pena invertir en periféricos que hacen la vida más fácil: unos buenos auriculares, una buena cámara para videoconferencias o una conexión a Internet con una velocidad de subida decente, ya que cada vez necesitamos más una sincronización constante de archivos en la nube.
3. Mejorar el estado de ánimo. Es innegable que la cultura de la empresa y el diseño de la oficina impactan en la productividad, y esto es también aplicable cuando eres tu propio jefe y tu espacio de trabajo es tu hogar. Haz lo necesario para crear el ambiente adecuado, por ejemplo escuchando música -aprovechando la ausencia de esos compañeros incapaces de disfrutar las virtudes de tus discos-. La música ambiental es eficaz en el bloqueo de los ruidos exteriores y favorece la concentración.
4. Darse un respiro. No pasa nada por no estar en tu escritorio ocho horas al día. Levantarse y caminar es una buena manera de refrescar la mente y recuperar la concentración perdida. Es difícil para cualquiera centrarse al cien por cien en cualquier tarea; en lugar de tratar de suprimir este impulso de inquietud, puedes mantenerlo ocupado dándole algo que hacer, aunque sea algo aparentemente sin sentido como girar un bolígrafo o arrojar una pelota contra la pared.
Vía TNW.