El prototipo que podéis ver en el vídeo más abajo tiene una movilidad relativamente reducida debido a las pocas secciones que utiliza, pero con suficientes podría convertirse casi en una especie de tentáculo urotsukidojiano.
El principio es sencillo, combinando el principio de actuador por atoramiento, que utiliza un contenedor elástico con material granulado en su interior y que al aplicar vacío permite agarrar objetos al deformarse, y junto con el uso de cables externos, se consigue una movilidad y agarres increíbles.
El atoramiento por secciones con válvulas de vacío consigue darle rigidez y capacidad de agarre para todo tipo de objetos, mientras que los cables guían la forma en que se dobla para conseguir movimientos y posiciones complicadas.
Gracias a esto, ahora sólo queda ponernos electrodos por el cuerpo y dormir en cubetas de yogur mientras seguimos contaminando la atmósfera para ponérselo un poquito más fácil a los robots de Matrix. [IEEE Spectrum]
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