La Agencia para el Desarrollo de la Defensa de Corea del Sur comenzará a trabajar en este uniforme en 2009, en un programa de dos fases. En la primera, trabajarán en el propio uniforme de combate, con el casco a prueba de balas (y minicámaras integradas) y su rifle de nueva generación, llamado K-11. El K-11 es el que tiene el sistema de guía láser, que se comunica con el casco, sus misiles en miniatura y proyectiles altamente explosivos.
El traje de combate, además del sistema de refrigeración mencionado, incluirá un sistema de identificación para distinguir entre amigos o enemigos, un GPS y un control de todos estos elementos.
En la segunda fase de desarrollo, los soldados obtendrán actualizaciones del uniforme, que les protegerán contra amenazas externas, como radiación atómica, agentes químicos, láseres y minas. Te preguntarás: ¿para qué quieren los coreanos este pedazo de equipación? ¡Muy fácil! Para obligarte a que les compres más televisores. — Rafa M. Claudín [The Raw Feed]
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