Dos grupos de interés estadounidenses, Citizens for Responsibilty and Ethics in Washington y National Security Archive, han demandado a la administración de George W.Bush, con la intención de obligar a la Casa Blanca a revelar el paradero de una serie de e-mails que fueron enviados entre marzo y octubre del año 2.003.
Estos correos, que podrían haber sido robados o destruídos por la propia Casa Blanca, podrían contener información muy delicada, como por ejemplo las razones que llevaron al gobierno norteamericano a comenzar una guerra en Irak.
Por esta razón, el juez que lleva el caso ha ordenado al gobierno de Bush que ponga a su disposición de forma inmediata los detalles sobre dónde se encuentran las copias de seguridad que suelen hacerse de los archivos de e-mail de la administración.
Según informa Slashdot, el juez ha comprobado una aparente contradicción entre lo declarado por la CIO de la Oficina Ejecutiva del Presidente, Theresa Payton, que asegura que las copias existen, y lo que otros funcionarios de la Casa Blanca han declarado, al asegurar que la práctica de hacer copias de seguridad de los archivos de correos, no se hace desde 2003.
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