Donald Trump quiere ‘cerrar’ Internet en Iraq y Siria

Se pueden decir muchas acerca de Donald Trump, pero nunca que se anda con remilgos. El precandidato republicano a la Presidencia de Estados Unidos dio anoche una solución mágica al problema del uso de Internet por parte del Estado Islámico: cerrar la Red.

En un debate entre miembros del Partido Republicano, Trump sugirió el bloqueo total del acceso a Internet en las regiones de Iraq y Siria controladas por el ISIS.

Naturalmente, los expertos se han apresurado a descalificar la idea. Más allá de los problemas que tan radical medida tendría para las instituciones, públicas y privadas, legítimas que operan en esas zonas, la idea de Donald Trump supondría una pesadilla logística que la haría casi imposible de implementar.

Internet es una red extensa e interconectada de computadoras. Para cortar el acceso a la gente, hay sólo dos opciones: conseguir la cooperación de todos los proveedores de Internet del planeta, o enviar tropas sólo para destruir todas las conexiones a Internet de los dos países. Pero incluso si los soldados estadounidenses destruyeran la infraestructura sobre el terreno, como torres y ordenadores, todavía quedarán los satélites de comunicaciones, algunos propiedad de Gobiernos poco afines a EEUU, para transmitir la información.

Y en cuanto a las consecuencias para los países afectados, los expertos consultados por CNET califican la ocurrencia de Trump de “terrible”. Thomas Ristenpart, profesor de ciencias de la computación en Cornell Tech, explica que “impedir a poblaciones enteras el acceso a información básica sería una catástrofe para los derechos humanos, en particular en las zonas del mundo que ya están en guerra. La capacidad de encontrar información con los teléfonos inteligentes conectados a Internet es vital para los refugiados que huyen de ISIS en Siria, por ejemplo”.

Claro que todo puede ser una simple boutade de Trump, que parece estar basando su campaña en afirmaciones polémicas, frases impactantes e ideas grandilocuentes para resolver los problemas del país, incluyendo algo tan crucial como combatir a los terroristas.