Dos investigadores de seguridad han demostrando cómo es posible romper el cifrado aplicado a las redes móviles GSM. Los dos expertos han demostrado cómo las llamadas realizadas entre teléfonos móviles pueden espiarse de forma remota utilizando un grupo de cuatro terminales GSM y un portátil que ejecute software de código abierto.
Los investigadores Karsten Nohl y Sylvian Munaut reconocen que la técnica de crackeo no es nueva, pero que antes era necesario hardware por valor de cifras de cuatro números. De hecho, un kit de especialista cuesta unos 1.500 dólares.
Karsten Nohl y Sylvian Munaut hicieron su demostración durante la celebración de la conferencia Chaos Computer Club que se celebró en Berlín la semana pasada, donde los investigadores explicaron que el uso de múltiples terminales permite limitar la búsqueda de un teléfono en particular a un área pequeña. Después se generan mensajes de texto con cabeceras en mal estado que llevan a que el terminal cargue un software desde internet sin el conocimiento del usuario.
El experimento se realizó con un Motorola de bajo coste cargado con un software especial que permitió que Nohl y Munaut fueran capaces de adentrarse en la red y espiar las conversaciones que se realizaban con el móvil afectado.
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