El IBM System/360 cumple 40 años
El fabricante invirtió el equivalente a 30.000 millones de dólares
actuales en lo que para muchos se define como la mayor apuesta
empresarial de todos los tiempos.
El System/360, la supercomputadora central de IBM que inició una
revolución informática y, entre otras cosas, permitió a los científicos
enviar el primer hombre a la Luna, celebra su cuadragésimo cumpleaños.
Cuatro décadas después de su lanzamiento, el “dinosaurio” de IBM continúa vivo
y coleando en su versión moderna, en contra de las expectativas de los
expertos, que predijeron su fin hace ya más de 10 años, según informa
EFE.
Las implicaciones que tuvo la máquina para la informática
actual son enormes. Antes del 7 de abril de 1964 los ordenadores
trabajaban por lotes, lo que quiere decir que tenían que concluir una
tarea para comenzar la siguiente. Así, la llegada de la primera
computadora multitarea de la historia puso fin a esta espera y desató
una revolución que cambió la forma de hacer negocios.
Las cifras
dan una idea de la envergadura del empeño, considerado por algunos como
la mayor apuesta empresarial de todos los tiempos: IBM invirtió 5.000
millones de dólares en el proyecto, el equivalente a 30.000 millones de
dólares actuales, según los números de la compañía. Además, el
System/360, que debe su nombre a los grados de la circunferencia, supuso
la contratación de 60.000 empleados y la apertura de cinco nuevas
plantas.
“Este es el comienzo de una nueva generación, no sólo de
ordenadores, sino de su aplicación a los negocios, la ciencia y el
gobierno”, indicó el entonces presidente de la compañía, Thomas Watson,
en la conferencia de prensa de Pughkeepsie (Nueva York), donde acudió un
contingente de 200 periodistas.
El esfuerzo mereció la pena, ya
que las ventas doblaron las proyecciones iniciales y, lo que es más
importante, contó entre sus primeros clientes con instituciones como la
NASA, Bank Of America o Time Life.
Entre otras cosas, la máquina
ayudó a la NASA a enviar los primeros astronautas a la Luna, permitió a
la administración de la Seguridad Social de EEUU el procesamiento de
millones de tarjetas de seguro médico y sirvió para que American
Airlines desarrollase su primera red de reservas de avión.