El “micromicrófono” tan sólo mide 0,5 x 0,5 milímetros y su creador es el iraní Bahram Azizollah Ganji, de la Facultad de Ingeniería Eléctrica y Computacional en la Universidad Noshirvani de Tecnología.
Según el mismo, el micrófono además de increíblemente pequeño tiene una sensibilidad muy alta y un consumo muy bajo, por lo que lo hace aún mejor candidato para ser usado en pequeños dispositivos.
Pero no sólo en móviles y tablets, también tendrá una gran utilidad en aparatos y sensores médicos, para sistemas de vigilancia y sobre todo para cuerpos de seguridad, espías y todo aquel con pelo en el pecho harto de que le peguen un micro con esparadrapo.
Además asegura que su fabricación sería de bajo coste, por lo que lo mismo a partir de ahora, en vez de colocar micrófonos cuidadosamente, las agencias de inteligencia adopten el método cabalgata de reyes y se dediquen a lanzar micros por ahí como si fueran caramelos. [ISNA]
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