Al contrario que otros coches eléctricos, el Mini E de BMW no tiene un calentador que mantenga la batería a la temperatura óptima cuando hace frío. Aunque parezca poco importante, reduce la capacidad de la batería hasta la mitad. Los que han tenido ocasión de probarlo afirman que a -5 grados centígrados sólo pudieron conducir 88,5 km, casi la mitad de los 160 km que anuncia BMW. Con temperaturas frías, aunque no tanto, pierde un 20 por ciento respecto a los climas cálidos. Un poco decepcionante, aunque de momento el vehículo sólo se ha podido utilizar en leasing y quizá BMW arregle el problema antes de llevarlo a una producción masiva. [CrunchGear]
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