El primo de Wall.e que inspecciona los generadores eólicos
Hasta ahora el método operativo estándar para revisar que todo funcione correctamente pasa por situarse bajo uno de estos modernos molinos de viento con los que un moderno Quijote buscaría confrontación.
Se detiene el funcionamiento de la turbina mientras armado con un potente teleobjetivo y una cámara fotográfica se va explorando a distancia la estructura hasta detectar algún fallo o daño.
Esto se hacía así hasta que General Electric fabricó este robot. Ahora desde abajo el operario controla el recorrido que realiza el ingenio mientras trepa cual Spiderman robótico por el gigantesco poste que sostiene la turbina fotografíando desde bien cerca la superficie de las aspas.
GE se ha unido a International Climbing Machines, una empresa neoyorquina especializada en robots trepadores, para conseguir esta máquina capaz de ascender 100 metros en vertical con una potente cámara fotográfica a cuestas de manera que pueda obtener documentación gráfica de lo que hay allá arriba y enviarla de inmediato al controlador que permanece abajo.
Para conseguir que suba por la superficie del poste el secreto está en un potente motor de vacío que, al estilo de la mochila-aspiradora de la que te hablábamos ayer aquí en Itespresso, ejerce una succión que literalmente “pega” al robot a la pared. Hasta 110 kilos de peso sería capaz de soportar esa bomba de vacío.
En una segunda fase los ingenieros de GE quieren añadir al robot unos sensores de microondas capaces de detectar hasta el más mínimo detalle del estado en que se encuentran las aspas de los molinos. ─[GE Reports]