Federico inicialmente usó un sistema de partículas para simular un fluido, luego tomó una instantánea y a través de un software creado por él mismo creó un complejo sistema que permitía a dos brazos robóticos industriales ir pegando una a una las 420.000 bolas en su sitio exacto.
De esta forma ha creado una escultura de 6,1 x 15,4 metros en un tiempo récord y sin la asistencia de personas, de manera que desde su concepción hasta finalización todo el proceso ha estado automatizado.
El próximo día 23 de Octubre se podrá contemplar la obra en el Museo de Massachusetts de Arte Contemporáneo en North Adams para el certamen MASS MoCA 2010. En los vídeos del final podéis ver como cada robot coge una bola, le pone pegamento y luego la coloca en su sitio perfectamente. Imaginaos la que puede liar en las piscinas de bolas de los niños pequeños.— Dani Burón [Massmoca]
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