España: país de banda ancha

La conexión a Internet ha sido observada desde hace tiempo como un factor indicativo del desarrollo tecnológico de los distintos países. La conexión a Internet permite acceder a distintas operaciones y servicios complejos que mejoran la productividad empresarial por un lado, y que permiten acceder a un buen número de recursos e información para el usuario particular. Por ello siempre se ha observado como uno de los factores que había que mejorar por encima de otros. La tónica general en Europa ha sido la adopción temprana de conexiones por línea analógica para ir incorporándose a la banda ancha en sus distintas opciones.

Sin embargo en España el caso ha sido distinto. De un estadio en el que apenas había conexiones a Internet, se ha generalizado la conexión mediante ADSL y WiFi va creando sus primeros pasos. La banda ancha extiende su poderío entre los usuarios particulares, y entre la empresa.

El último informe de AETIC y DMR indican que el 82 por ciento de las empresas ya cuenta con conexión a Internet, sólo dos puntos por debajo de la media europea, y un 86 por ciento de estas corporaciones tiene una conexión XDSL (ADSL, DSL,…). Esta situación supone un acicate para la tecnologización de España, que no alcanza la media europea en otras mediciones, pero que permite augurar un buen desarrollo y crecimiento. Debido a haber salvado el estadio intermedio de conexión a Internet la empresa española ya está en condiciones de acceder a las tecnologías más avanzadas con un gasto en infraestructura menor.