Este no será (probablemente) el iPhone5, pero… ¿a que mola?
El diseño del que hace gala este diseño que os mostramos hoy hace gala de una recuperación de las curvas, algo que nos remite al iPhone3GS pero llevado al extremo.
En lugar de un bisel curvo lo que tendríamos seria una estructura trasera totalmente curva en sentido longitudinal. Esto permitiría unos extremos superior e inferior mucho más delgados de lo que hasta ahora podríamos encontrar en cualquier modelo de smartphone en el mercado. A cambio la parte central sería más gruesa permitiendo albergar, por ejemplo, una batería mayor que otorgue más autonomía, algo necesario si como todos los rumores apuntan, el iPhone5 cuenta con procesadores más potentes.
Si todo esto termina siendo poco más que un ejercicio de estilo o una interesada filtración para pulsar la opinión de los consumidores no tardaremos mucho en saberlo, apenas tres mesesecicos de nada, impacientes míos. [Ciccarese Design]