Europa quiere pasar de consumir a producir tecnología de seguridad
La UE ha acordado constituir el Foro Europeo para la Seguridad e Innovación, una plataforma de diálogo entre la política, las empresas y los responsables del sector.
La Unión Europea (UE) quiere pasar de convertirse de mero “consumidor” a “productor” de tecnología de seguridad y para ello quiere mejorar la cooperación entre los distintos actores: gobiernos, empresas y fuerzas de seguridad.
Así lo han asegurado en Berlín los comisarios europeos de Justicia e Industria, Franco Frattini y Günter Verheugen, respectivamente, quienes asisten a una conferencia sobre la investigación en materia de seguridad organizada por la presidencia alemana de la UE.
En esa reunión, presidida por la ministra alemana de Investigación y Ciencia, Annette Schavan, y en la que participan un millar de expertos, se ha acordado constituir el Foro Europeo para la Seguridad e Innovación (ESRIF, por sus siglas en inglés), una plataforma de diálogo entre la política, las empresas y los responsables de la seguridad, que estará operativo en septiembre.
“Europa no sólo debe consumir sino producir seguridad”, ha señalado Frattini en una rueda de prensa, en la que apuesta por la creación de “capacidades autónomas de seguridad europeas”, como ya ocurre en el terreno militar.
Tanto Frattini como Verheugen subrayaron que la UE debe dotarse de las tecnologías necesarias para poder “competir en el mercado mundial” y no ser únicamente consumidores de tecnología que se fabrica en otra parte del mundo.
El séptimo programa de fomento de la investigación europeo está dotado con 1.400 millones de euros para el periodo 2007-2013, de los que parte podrá destinarse al sector de seguridad. El problema, por tanto, no lo deberían constituir los fondos, según recalcaron ambos comisarios.
Para Verheugen, uno de los objetivos centrales de este nuevo mercado europeo debe ser evitar duplicidades en los gastos y en la investigación, como, según lamentó, está ocurriendo en el terreno militar.
“Lo que no quiero ver son 27 mercados nacionales paralelos como en la industria armamentista. Como contribuyentes que son, los ciudadanos tienen el derecho a gozar de la solución más eficiente”, declaró Verheugen.
El eurocomisario se mostraba incluso partidario de que el sector civil y el militar compartan sus tecnologías, un tema “muy sensible” como ha reconocido, pero que a su juicio no debería comportar problemas si hay una clara división entre la “aplicación” de las tecnologías y el “desarrollo científico”. “Debemos acabar con el secretismo”, sostuvo.