Geist

Los juegos de acción en primera persona no se prodigan demasiado en GameCube, aunque, afortunadamente, los adeptos a la consola de Nintendo tienen a su disposición FPS tan excepcionales como los dos Metroid Prime de Retro Studios. Geist combina a partes iguales los mejores ingredientes de estos títulos con algunos elementos habituales en los juegos de supervivencia y horror. Y es que su argumento puede ser tildado de muchas formas diferentes, pero nunca de poco original.

La aventura de N-Space ( www.n-space.com ), nombre de la empresa desarrolladora responsable, entre otros, de Duke Nukem: Land of the Babes y Die Hard Trilogy 2 para PlayStation, comienza cuando nuestro personaje pierde su cuerpo y se ve obligado a vagar como un espectro capaz de poseer tanto a seres vivos como objetos. Este es, sin lugar a dudas, el ingrediente más atractivo e innovador del juego, sin embargo las posibilidades no son tan amplias como puede parecer en primera instancia. La razón no es otra que la necesidad de poseer seres u objetos muy concretos para superar un determinado obstáculo, lo que restringe el abanico de opciones a disposición del jugador.

El motor gráfico implementado para dar forma a Geist destaca por su inusual realismo, confiriendo tanto a los personajes como a los entornos una estética muy cuidada que en determinados momentos se asemeja más a una película que a un juego de acción en primera persona. La correcta iluminación y depuradas texturas contribuyen de forma decisiva a otorgarle este aspecto. No obstante, sería excesivo afirmar que este juego es uno de los puntales en materia gráfica de la plataforma. Resident Evil 4 y Metroid Prime 2: Echoes lo superan con holgura.

Por otra parte, el sonido también ha sido muy cuidado, en especial la banda sonora, aunque de nuevo carece de la variedad y riqueza de otros títulos para GameCube. Aun así, resulta convincente en prácticamente todas las situaciones.

Juan Carlos López Revilla PC Actual