Gigantesco alijo de gadgets falsos interceptado en Los Ángeles
Más de 10 millones de dólares era el valor que tenían en el mercado todos los productos encontrados, desde copias piratas hasta productos robados. En cuanto a las copias se trataba sobre todo de versiones antiguas, mucho más fáciles de copiar y de que parezcan auténticas, además de que generan menos sospechas al tener precios reducidos.
Los cargamentos llegaban desde Asia y los encargados en EEUU eran los hermanos Bahram y Edward Zahab, que recibían las piezas de los productos para luego ensamblarlos y venderlos por la calle, ebay o tiendas.
De todas maneras, puede que muchas de sus copias sigan por ahí, así que tened cuidado, como medida de prevención os aconsejamos desconfiar de iPods con parches, PSPs con botones de madera y iPods que en vez de manzanas tengan calaveras…— Dani Burón [LA Times]