La comunicación en el espacio presenta una gran cantidad de problemas ya que, debido a la rotación de la tierra, los remitentes y receptores cambian sus posiciones constantemente y las largas distancias hacen que se produzcan largos retardos. La red hertziana con la que actualmente se trabaja es mejorada y actualizada con cada nueva misión, lo que significa que este equipo no se podrá usar en nuevas lanzaderas.
El proyecto llamado “Interplanetary Internet” será finalmente probado a bordo de la ISS en 2009. Si funciona, las misiones espaciales que se den en el futuro sí podrán usar estos sistemas, que definitivamente facilitan y abaratan las comunicaciones. Ahora tan sólo nos queda saber si los astronautas tendrán que llamar a Google o la NASA cada vez que se les escacharre el router o se queden sin conexión. Esperemos que sea quien sea su servicio de atención al cliente funcione mejor que el de Telefónica. — Alberto Payo [Technology Review]
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