La denominación que Hisense ha dado a este televisor 4K es XT880.
No tiene un tamaño tan desmesurado como el televisor grande que te cagas (que diría el bueno de Renton) de Sony, pero con 50 pulgadas tampoco es precisamente una tele de bolsillo.
Sony aún no ha anunciado el precio de su televisor 4K de 65″ destinado a la comercialización generalizada, pero es de suponer que sí el precio estimado para el modelo casi de demostración de 84″ supera los 20.000€ siempre estará por encima del precio con el que el fabricante chino pretende popularizar las pantallas 4K.
Con todo, hablaríamos de unas resoluciones en las que casi ni pegando la cara a la pantalla serias capaz de distinguir los píxeles que conforman la imagen.
También hay que reconocer que sentándose a unos 3 metros de la pantalla si esta tiene un tamaño de 50″ sería en la práctica imposible apreciar efectos dientes de sierra o similares por lo que el 4K tendría más sentido en tamaños de pantalla mayores donde bajo determinadas circunstancias y a distancias más cortas ya sí se apreciarían los píxeles.
En cualquier caso esto supone un paso más para que en pocos años empecemos a ver televisores 4K en las grandes superficies de venta de electrodomésticos.
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