Esta jarra de cerveza con el nombre raruno como él solo de Jokki Hour, cuenta con un sistema de válvulas y resorte, que comunica una cámara de aire en su parte inferior con el resto.
Con sólo pulsar un botón, el aire pasa a la jarra creando espuma en la cerveza instantáneamente al subir. De esta forma no necesita pilas ni que tengas que ir haciendo el guarrete con una pajita soplando.
Eso sí, por muy relativamente útil que sea, probablemente aunque seas un ferviente admirador de la cerveza no fliparás en colores tanto como los japoneses del anuncio, que o bien exageran un poquito o tienen un grave problema de alcoholismo. Preocupante por cierto que al final del vídeo parezca que están bebiendo detergente.
Está disponible en dos colores, amarillo y negro, para su mecanismo interno y aunque no está tan recargada como una jarra tradicional alemana cuesta 22,50 dólares. ¿Merece la pena su poder espumoso por ese precio? [DVice]
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