La subida del IVA sorprende al sector TIC
La mayoría de asociaciones pronostican un alza generalizada de los precios de los productos informáticos o los servicios de telecomunicaciones y una mayor contracción del consumo como consecuencia de la medida adoptada por el Gobierno
El próximo 1 de septiembre comenzará a aplicarse la temida subida del IVA aprobada recientemente por el Gobierno central, cuyo objetivo es equilibrar las sufridas cuentas estatales. El tipo general pasa del 18 al 21% y el reducido sube del 8 al 10%, mientras que el superreducido se mantiene en un exiguo 4%. Además, algunos productos y servicios cambian de régimen, por lo que pasarán directamente del 4 y el 8% al 21.%
El sector TIC no se mantendrá ajeno a estos cambios fiscales, aunque de momento no sabemos qué incidencia tendrá la subida en los bolsillos de los consumidores, ya que ni la Asociación de Empresas de Electrónica, Tecnologías de la Información, Telecomunicaciones y Contenidos Digitales (Ametic), ni la Asociación Española de Distribuidores y Editores de Software de Entretenimiento (aDeSe) se han pronunciado oficialmente al respecto.
No obstante, Antonio Cimorra, director de Tecnologías de la Información y Estudios de Ametic, señaló recientemente, durante la presentación de los resultados del sector en 2011, que la medida afectará “intensamente” en el segmento de consumo, que en su opinión podría contraerse aún más. Pese a ello, Cimorra se mostró esperanzado en que el impacto “no sea muy acusado”.
Sin embargo, la mayoría de empresas TIC han reconocido que la subida del IVA podría terminar de rematar un año especialmente malo para el sector, que ya retrocedió un 3% durante el primer trimestre de 2012 en relación al año anterior, cuando se alcanzó una facturación de 17.725 millones de euros (un 2,1% menos que en 2010).
Esta tendencia negativa responde a la pésima evolución del consumo interno, que acumula tres años consecutivos de caídas y que en 2011 afectó especialmente a la venta de equipos, que retrocedió un 11,2%. No es de extrañar, por ello, que muchos pronostiquen una mayor contracción de la demanda interna tras la inminente subida del impuesto indirecto.