La telefonía sobre Internet no tendrá que cumplir las regulaciones estatales

Regulación

Esta limitación de las normativas empleada por la FCC estimulará el crecimiento de los servicios de llamadas realizadas vía online.

La Comisión Federal de Comunicaciones de Estados Unidos (FCC, por sus siglas en inglés) ha eximido a las empresas que ofrecen llamadas telefónicas a través de Internet de las regulaciones de los estados. La decisión supone un balón de oxigeno a los proveedores de este tipo de servicios, como ATT y Vonage Holdings.

Los cinco miembros de la FCC señalaron en su fallo que los servicios telefónicos por Internet son “interestatales”, lo que significa que los proveedores de estos servicios no tendrán que gastar dinero y tiempo en cumplir con las regulaciones que, sobre tarifas, certificaciones y llamadas de emergencia, aplica cada estado a otras firmas telefónicas.

El presidente de la FCC, Michael Powell, dijo que esta limitación de las regulaciones estimulará el crecimiento de los servicios de llamadas por Internet que, según los expertos, pasarán de generar unos 34,5 millones de dólares en 2003 a cerca de 777 millones en 2005.

En un comunicado publicado antes de que se anunciara la decisión, la compañía Vonage indicó que esta medida permitiría a las empresas que luchan en este sector liberarse “de ese complicado mosaico que supone la reglamentación de los servicios públicos en 50 estados”. Vonage, pionera en el mercado y el mayor proveedor con 300.000 líneas, quiere, al igual que sus competidores como ATT, Verizon y Comcast, ampliar el servicio de llamadas por Internet, que canaliza las conversaciones de la forma en que se mueven los mensajes electrónicos, pero a un costo mucho menor que las llamadas comunes.

La decisión de la FCC es la tercera en lo que se lleva de año para limitar la regulación de la telefonía por Internet. En febrero pasado, la FCC eximió a las llamadas de computadora a computadora de las regulaciones telefónicas tradicionales, y en abril rechazó una petición para que las llamadas regulares transmitidas parcialmente por Internet recibieran el mismo trato que las realizadas a través de Vonage, que se originan en la Red.