Las baterías recargables reducen toneladas de residuos

Tóxicos y contaminantes

Uniross, compañía especializada en baterías recargables y cargadores, continúa con su labor de protección del medio ambiente al reafirmar su colaboración con la asociación Recharge, de la que es cofundador. Recharge lleva un año actuando a través de tres vías: simplificando la recogida y el reciclado de las baterías recargables una vez agotado su ciclo de vida, formando a los consumidores sobre las ventajas y beneficios de las baterías recargables y representando a los agentes del mercado (fabricantes, distribuidores y organizaciones de recogida y reciclado) ante las autoridades locales en la Comisión Europea. Según señala el grupo, un gran número de los aparatos que tenemos en nuestros hogares funcionan con baterías, además de los dispositivos móviles, como cámaras digitales y ordenadores portátiles. “El problema comienza cuando las pilas o las baterías se gastan y hay que deshacerse de ellas. Si estas baterías terminan mezcladas con el resto de la basura en el vertedero, los metales tóxicos que contienen terminarán contaminando el suelo y el agua”.

En este sentido, un estudio realizado por la fundación Ecotic, PriceWaterhouseCoopers y AETIC estima que en cuatro años, las toneladas de residuos de aparatos de electrónica de consumo en general van a crecer en un 18 por ciento, pasando de 82.000 toneladas en 2006 a las más de 100.000 en 2010. En 2003 el 45 por ciento del número de pilas vendidas en la Unión Europea (72.155 toneladas) fueron abandonadas o sometidas a procesos de incineración, en lugar de ser recicladas.

La utilización de baterías recargables es la solución más efectiva para solucionar este problema, ya que estas baterías pueden ser recargadas cientos de veces. Su vida útil es de unos siete años, mientras que la vida de una batería estándar desechable apenas alcanza uno o dos años. En dispositivos digitales como cámaras digitales, cámaras DV y reproductores MP3, las baterías recargables duran hasta cuatro veces más que unas baterías estándar y permiten ser recargadas, añade la organización.

Características de las baterías recargables

Este tipo de baterías están compuestas por dos electrodos conectados a través de una solución conductora denominada electrolito. En el momento en el que una batería se recarga, la energía eléctrica se convierte en energía química, y cuando un determinado dispositivo requiere energía, la batería vuelve a convertir la energía química en eléctrica.

Hoy en día las baterías recargables utilizan tres tecnologías diferentes: la formada por níquel y cadmio, la opción ideal para la mayoría de los dispositivos para el hogar; otra compuesta de níquel e hidruro de metal, muy útil para los dispositivos digitales; y las formadas por Litio e Ion o Litio y Polímero, ideales para los teléfonos móviles y ordenadores portátiles, videocámaras y cámaras digitales.

El portfolio de baterías de Uniross cuenta con dos modelos, el CR-V3 y CR-123, que utilizan esta tecnología de Litio. Las baterías CR-V3 son más duraderas que las de Ni-MH, al conservar el 90 por ciento de la carga después de 28 días sin utilizar la cámara, mientras que los recargables de Ni-MH tan sólo guardan el 60 por ciento de su carga original. “Sin efecto memoria y un 30 por ciento más ligeras, las baterías recargables CR-V3 reemplazan a las baterías alcalinas, a las recargables de Ni-MH y a las baterías desechables de litio”, concluyen las fuentes.

Una de las variables que diferencian a una batería recargable de otra es su capacidad, la cual depende de la cantidad de potencia que ésta puede acumular, lo que se mide en mAh (milamperio por hora). De este modo, cuanta más capacidad tenga la batería, la duración de funcionamiento del dispositivo electrónico será mayor. Uniross dispone de un de las baterías de mayor capacidad del mercado, la 2500mAh AA. Esta batería aumenta la duración del funcionamiento del dispositivo electrónico en un 15 por ciento.

La otra variable determinante es el tiempo de recarga de la batería, que depende del flujo de carga suministrado por el cargador, este flujo se mide en Ma (milamperios). Cuanto más alta es la corriente, más corto es el tiempo de carga. Este tiempo también varía según la capacidad de la batería: a mayor capacidad de almacenamiento de energía el tiempo de recarga es mayor.

Actualmente uno de los cargadores más rápidos es el Sprint 15 min de Uniross para 4 posiciones que se comercializa con cuatro baterías especiales de 15 minutos. Este cargador permite recargar de 1 a 4 baterías de forma independiente en tan sólo un cuarto de hora.

Por otra parte, Uniross lanzó recientemente al mercado el cargador Sprint 90 minutos, que se caracteriza por su diseño compacto y su adaptador de enchufe integrado. Este modelo permite cargar cuatro baterías AA o AAA en tan solo hora y media. Gracias a su control de carga inteligente, se desconecta cuando las baterías han completado su carga. Además, está dotado de un temporizador de tiempo y temperatura, así como de un control de voltaje, para garantizar la seguridad de uso.