La próxima generación de Samsung Galaxy S será el primera en usar las nuevas pantallas Super AMOLED de 5″ 1080p, que podremos ver teóricamente en el CES de dentro de unos meses.
Además se supone que también llevará una cámara de 13MP en lugar de la de 8MP de los modelos anteriores, eso si consiguen que Sony produzca suficientes para toda la demanda, o que acudan a otro suministrador.
Pero lo que quizás llame más la atención es que se asegura que llevará un Exynos 5450, una verdadera monstruosidad en 28nm, con cuatro núcleos A15 a 2GHz, y una GPU Mali-658.
Siendo tan sólo rumores, la verdad es que lo único que estaría más o menos asegurado sería la pantalla y quizás la cámara. Que un smartphone use un procesador tan bestial no tiene mucho sentido a no ser que venga algo capado o que se las ingenien para que tenga su propio reactor nuclear. [GSMArena]
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