Básicamente un altavoz genera sonido a través de la vibración. Una membrana se mueve en función de unos impulsos eléctricos, desplazando el aire y produciendo en función de dicha vibración sonidos identificables con voz o música.
Inspirándose en este principio las mentes pensantes de Apple han patentado un sistema que aprovecharía la flexibilidad de la pantalla del iPad para que la misma oscilase de modo que produjese los sonidos, haciendo innecesaria la presencia de altavoces dado que esa función la cumpliría la propia pantalla.
Un futuro en el que la pantalla sería aún más importante sensorialmente que en la actualidad. De una pantalla que sólo atendía a uno de los sentidos (la vista) ya hemos pasado a complementar su utilización con otro sentido (el tacto) y esta patente supondría añadirle el sentido del oído.
Nos ahorraremos los chistes de mal gusto sobre las posibilidades olfativas y degustativas de las pantallas táctiles después de una sesión de dedazos grasientos toqueteando el tablet. -[Unwired View]
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