Los clientes de un bar holandés pasan de un ladrón a punta de pistola

Resulta fascinante como a pesar de entrar de repente en el bar de Rotterdam, T Halve Maatje, con una máscara y una pistola, la gente pasara absolutamente del ladrón y no le hiciera ningún caso. De hecho hasta un cliente lo aparta un momento para ir a sentarse.

Ante tal situación el camarero le invita a irse y el ladrón incrédulo y sin saber muy bien como reaccionar decide irse, viéndose al momento perseguido por todos los clientes, incluyendo uno que corría maratones.

Vamos, un epic FAIL sorprendente en toda regla. Pero de todas maneras esperemos que esta actitud no sirva de ejemplo, porque otras veces probablemente el ladrón no sea tan rematadamente inepto y por muy bien que quede en las pelis, actuar de héroe por algo tan frívolo como el dinero no merece la pena.

Eso sí, a nuestro genial ladrón le recomiendo ver unas cuantas pelis de acción mientras está en su celda, o mejor aún, que se dedique a algo más legítimo, y por supuesto no me refiero a la política. [Geekologie]