Muchas eran las especulaciones de que Sony estaba ultimando un controlador de movimiento, denominado provisionalmente `Arc´ y ayer era la propia compañía quien presentaba oficialmente el periférico que muchos ya han categorizado como `Wiimote killer´.
Move es un mando que se basa en el controlador de movimiento con acelerómetros de Nintendo, pero que también combina su uso con la Eye Toy. Para funcionar utiliza un giroscopio de tres ejes, un acelerómetro de tres ejes, un sensor de campo magnético terrestre, así como una esfera luminosa. Esta última, con LEDs de diferentes colores, es la que sigue la cámara de PlayStation para identificar la posición/situación del usuario, también respecto a la distancia entre este y el dispositivo.
El mando puede soportar hasta cuatro jugadores y cuenta con un mando supletorio (sub-control) que permite extiende sus funcionalidades, de manera similar al Nunchuck de Nintendo, aunque éste es inalámbrico.
Move se podrá adquirir en otoño por un precio aproximado a los 100 dólares en un pack que incorporará la cámara de PlayStation y se espera que el periférico tenga gran adopción para shooters y juegos de lucha relacionados con armas de fuego, espadas, etc.
Por otro lado, la japonesa podría no quedarse estancada con Move. Sony está estudiando nuevas tecnologías y hace un año registró una patente basada en un controlador de juegos universal que podría funcionar en todas las consolas. Este dispositivo incluiría una pantalla LCD que ofrecería la posibilidad de escoger la consola que se quiere manejar, desde Xbox y Xbox 360, hasta auténticos clásicos de marcas como Sega, Atari o Amiga.
“Tú eres el mando”. Este es el eslogan que usa Microsoft para promocionar su nueva tecnología que revolucionará el sector del entretenimiento y que usará nuestro propio cuerpo como controlador para la Xbox360.
Se lanzará en noviembre y se basará en un hardware con forma de barra en la que están incorporadas una cámara RGB, un sensor CMOS de profundidad y un micrófono multidireccional que captan tanto los movimientos de los jugadores en , sus como sus rostros y su voz. Jugando con ellos se podrán controlar tanto el software que se vaya lanzando en el futuro para la plataforma como los propios menús del navegador, funcionando con cualquier consola Xbox nueva o antigua.
A primera vista puede pensarse que esta tecnología es una mezcla de la Wii y el EyeToy de PlayStation, sin embargo, es mucho más precisa, y no requiere de mandos, claro. Sin embargo, la diferencia principal es que Project Natal será en tres dimensiones. El sensor CMOS “escanea” la habitación en la que se utilice y reconoce todo su espacio independientemente de las condiciones lumínicas, trasladándolo al espacio virtual de cada juego.
Así, además de poder tomar los movimientos de partes precisas del cuerpo (hasta una treintena) el sistema puede leer la distancia a la que se encuentra el sujeto del hardware y sus movimientos por la estancia, como bien explica PopSci en este artículo.
La primera vez que Project Natal se usa, la tecnología realiza un escaneado del cuerpo, fijando puntos concretos para efectuar la representación virtual del jugador de una forma parecida a la que se realizan algunas películas de animación. Posteriormente, se pasa a “tomar medidas” de la habitación.
Además de la espectacularidad de este controlador “sin controlador” hay que pensar en todas las repercusiones que esta nueva forma de juego podría tener. Por primera vez, en toda la historia de las plataformas de juegos, se eliminan los periféricos dirigidos a jugar. La experiencia puede resultar extraña al principio para el usuario, pero a largo plazo puede proporcionarles mayor comodidad y facilitar las cosas a la propia firma de Redmond, que no tendrá que preocuparse de costes de fabricación, distribución, etc.
Cuando en noviembre de 2006 Nintendo lanzó su quinta plataforma de juegos, la Wii, con un mando que se basaba en el movimiento para jugar, sus principales competidoras en el sector esbozaron una sonrisa maliciosa. Sony y Microsoft ridiculizaron entonces el controlador de la japonesa y ahora el tiempo, les ha puesto en su sitio, con sus principales proyectos basados en él.
La Wii ha alcanzado records de ventas en todo el mundo, ha revolucionado el sector de las consolas y ha atraído a nuevos segmentos de jugadores, consiguiendo que los videojuegos sean una experiencia para toda la familia y para todas las edades. Y todo ello sin modificar su controlador apenas un ápice en estos cuatro años.
El Wiimote sólo ha experimentado pequeñas variaciones para mejorar su uso, como las proporcionadas por el adaptador WiiMotion Plus, pero su apariencia no se ha cambiado. Lo que sí han proliferado han sido los “apéndices” alrededor del mismo para todo tipo de juegos y finalidades.
Así, hay una lista muy amplia de controladores que la propia Nintendo y otras compañías, que han querido aprovechar el éxito de la plataforma, han ido lanzando y que acoplan el Wiimote en su estructura. Además del popular Nunchuck destacan Wii Wheel, un volante para juegos de coches como Mario Kart, Wii Zapper, una ametralladora pensada para shooters y en el apartado más curioso, Wii Baby and me, un muñeco en el que se introduce el Wiimote y que mide si los cuidados de la “criatura” son adecuados. Algunos maestros del cine como George Lucas también han fijado su mirada en la consola y han lanzado periféricos de Star Wars para la misma. En concreto, pistolas láser y sables láser, que emulan a los de la saga galáctica.
Las patentes registradas por la propia firma japonesa no se quedan atrás en originalidad con, por ejemplo, un dispositivo con forma de pelota que se acopla el Wiimote y sirve para juegos de fútbol americano o un controlador para montar a caballo.
Al mismo tiempo, se han creado otros equipos de hardware que funcionan de forma independiente, como la tabla WiiBalanceBoard, de mucha acogida entre los usuarios para hacer ejercicio en casa con el juego WiiFit, la alfombrilla de baile o la Wii Guitar, muy similar al instrumento del Guitar Hero o Rock Band. Y en breve, se espera Wii Vitality Sensor, para medir el pulso y la presión sanguínea.
Para recuperar el sabor tradicional de los juegos lo que sí se ha anunciado desde Nintendo para el mercado asiático es un mando llamado Pro cuya apariencia es muy parecida a la de un clásico mando de GameCube.
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