Los juegos de realidad virtual más cerca que nunca con Oculus Rift
Como podéis ver tienen pinta de gafas de esquí retrofuturistas, pero la razón de esto no es emular a una peli de ciencia ficción de serie B, sino porque de esta manera aíslan más del entorno y pueden ofrecer una visión estereoscópica de 110 grados.
Estamos hablando de una visión de inmersión total sin percibir los bordes, como ocurre en otros sistemas parecidos que suelen tener tan sólo 40 grados. Además la resolución supera la media de lo que suelen tener otras gafas, se trata de 640 x 800 para cada ojo.
Pero para que la sensación de “estar ahí” sea aún mayor, dispone de un sensor de posición de la cabeza de 6 grados de libertad de latencia ultra baja, ofreciendo una respuesta prácticamente instantánea y evitando que parezca que nuestro personaje virtual tenga los reflejos de un yonki de callejeros.
Tiene conexión para DVI, HDMI y USB, por lo que podrá usarse en PCs y móviles, e incluso puede que consolas. A pesar de llevar todo esto, sólo pesa 220 gramos, haciéndolo fácil de llevar durante bastante tiempo.
Pero lo mejor es el precio, 300 dólares, una ganga con respecto a otras gafas. Incluye en este precio el kit de desarrollo y hasta una copia de Doom 3 BFG Edition. Vamos que hasta que empiecen a salir más títulos tendrás para divertirte sin problemas.
Con el millón de dólares recaudado a 4 semanas de que termine su plazo, su éxito está asegurado, aunque tendremos que esperar hasta diciembre para hacernos con ellas y poder olvidarnos de la realidad. [Kickstarter]