Los taxistas japoneses recriminan a Toyota su colaboración con Uber

Aunque en varias ciudades se ha demostrado que la llegada de Uber no supone la gran caída del uso de taxis que muchas veces se asegura, la realidad es que la aplicación supone una competencia bastante injusta para los taxistas, ya que no pagan licencias ni hacen frente a otros muchos gastos a los que están obligados los conductores de taxi.

Para tratar de dar respuesta a las quejas de los taxistas, diferentes países y ciudades han buscado soluciones dispares, que van desde obligar a Uber a una mayor regulación, que los conductores de la app tengan licencia de taxi, prohibir totalmente el servicio o dejarlo tal como está. A pesar de estas dificultades, la financiación a Uber no ha parado, y multitud de empresas han decido colaborar y asociarse con ella, incluido Toyota.

Ahora Toyota se ve en el foco de las críticas de los taxistas japoneses por su acuerdo con Uber, ya que el 80% de los taxistas usan coches de la compañía y para ellos Uber es el enemigo, por lo que no entienden como puedan asociarse con ellos. En Japón se ha decidido que sólo los taxis puedan ofrecer los servicios de Uber, lo que limita bastante el servicio, aunque las zonas rurales y con transporte público limitado pueden llegar a acuerdos con Uber.

La colaboración de Toyota con la empresa, que entre otras cosas incluye un acuerdo de leasing para sus conductores, ha llevado a que Akio Toyoda tenga que dar explicaciones. Según el presidente de Toyota, que se ha disculpado por no notificar sobre el acuerdo con Uber a la federación de taxis de Japón, que representa a 200.000 del país, y ha aclarado que no afectaría a Japón, sólo al extranjero, y es una estrategia necesaria ante la posición estratégica que están tomando otros fabricantes de coches con Uber y otros servicios similares en todo el mundo.