Microsoft se enfoca al “entretenimiento social” con la Xbox One
La consola next-gen de Microsoft ya está a la venta. La Xbox One aspira a convertirse en el “centro de entretenimiento del hogar”, más allá de los videojuegos.
Llegó el Día D para la consola next-gen de Microsoft. La Xbox One ya puede adquirirse en todo el mundo, poniendo fin a una espera de casi tres meses desde que se anunciara su salida al mercado. Eventos de presentación en las grandes capitales del planeta, incluido el de la Plaza de Colón en Madrid, precedieron a la llegada del dispositivo con el que Microsoft quiere dominar la nueva generación de la industria del videojuego.
Aunque, a tenor de las palabras de la presidenta de Microsoft España, Maria Garaña, en la presentación, la Xbox One aspira a ir más allá de los videojuegos, convirtiéndose en el “centro de entretenimiento del hogar“. Ofrecer un único dispositivo para ver películas y programas de televisión, chatear vía Skype o compartir contenidos, es la estrategia de Microsoft para posicionarse en el mercado de las consolas de nueva generación.
La interacción con el usuario, y de los usuarios entre sí, es otra de las bazas de la Xbox One. El reconocimiento facial que incorpora Kinect y los perfiles de juego para emparejar a los jugadores online van en esta dirección.
Después de las menciones al entretenimiento doméstico y a su perfil social, queda lo más importante para el gran público: los juegos. A pesar de que el catálogo de juegos anunciados exclusivamente para la Xbox One es reducido (Dead Rising 3, Forza Motorsport 5 y Ryse: Son of Rome), la consola contará con otros 19 títulos, también presentes en Xbox 360, entre los que destacan Fifa 14 Legends, Call of Duty: Ghosts o Battlefield 4.
Ya disponible por 499 euros, la Xbox One arranca en España y en el resto de Europa con la ventaja de no competir con su rival de Sony, la PlayStation 4, hasta la semana que viene. El lunes conoceremos si el debut de la consola de Microsoft está a la altura del de su competidora en EEUU.