Nintendo ha tomado, por primera vez, medidas contra el pirate o de su consola portátil, la Nintendo DS. Esta videoconsola posee una ranura trasera en la que se insertan los juegos, normalmente un cartucho por juego, pero en la que también se puede colocar un cartucho especial que permite piratear la consola.
Este ‘cartucho pirata’ permite la inserción de una tarjeta SD o microSD en la que se pueden almacenar varios juegos que se descargan gratuitamente de Internet. Hasta ahora, esta práctica estaba tolerada con el pretexto de que sólo la llevaban a cabo los usuarios que poseían el juego original, y que hacían una “copia de seguridad” de los títulos que ya tenían.
Sin embargo Nintendo ha decidido impedir que otras empresas se aprovechen impunemente de su tecnología y vendan tarjetas y dispositivos que permitan piratear la consola. La compañía interpuesto una demanda contra cinco empresas japonesas por importar y vender equipo que permite reproducir software y juegos descargados de Internet.
Como publica Reuters, la demanda fue presentada ayer en el Tribunal de Distrito de Tokio junto a otros 54 fabricantes de software japonenses.
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