Tras comprar la unidad de redes de Motorola por 1.200 millones de dólares el pasado mes de abril, Nokia Siemens Networks anunció que necesitaba echar a 6.900 empleados en todo el mundo.
La serie de despidos acaba de comenzar a materializarse. Ayer mismo Nokia Siemens Networks reconocía que esta semana se ha llevado a cabo la destrucción de los primeros 1.500 empleos.
De momento el país más afectado ha sido el Reino Unido, aunque los recortes de personal van a afectar a las divisiones de GSM y tecnología Wimax sobre todo, en numerosos países, incluido Estados Unidos, según señala Reuters.
La joint venture formada en 2007 por Nokia y Siemens necesita ser más operativa y flexible, sobre todo tras la creciente rivalidad que suponen firmas emergentes como Huawei y Ericsson.
En las próximas semanas, podría completar su serie de despidos, aunque algunos analistas señalan que podrían no ser los últimos que anunciase Nokia Siemens Networks antes de que finalice el año.
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