Nokia sigue desplomándose y empiezan los rumores de venta
La compañía finlandesa cayó un 7,16% en bolsa, cerrando con sus acciones al nivel más bajo desde abril de 1997.
Nokia está viviendo estos días las que posiblemente sean las jornadas más negras de la historia: tras anunciar ayer que rebajaban las previsiones para el primer trimestre, la firma finlandesa ha iniciado un desplome en bolsa que acabó hoy, al cierre, con sus acciones a 3,04 euros: su nivel más bajo desde abril de 1997. En tan solo dos jornadas, Nokia ha acumulado pérdidas del 21,66%.
A la luz de la debacle, analistas y expertos empiezan a especular con qué salidas le quedan a la compañía. Una de las versiones es que Microsoft es quien debe tomar las riendas, y ver si así consiguen que su matrimonio, anunciado hace ya casi año y medio, empiece a enderezar las cosas. De momento, no obstante, poco ha cambiado: Windows Phone no ha logrado acercarse a Android o iOS y Symbian se desvanece hacia su desaparición.
La otra estrategia que se propone desde los círculos de expertos es que quizá a Nokia le iría mejor si empezase a deshacerse de partes de su negocio. ¿Qué opciones se barajan? Un poco de todo: Nokia podría vender su negocio de teléfonos de gama baja y centrarse en los smartphones, adelgazando la compañía; vender su porfolio de patentes (posiblemente a Microsoft); deshacerse de la unidad Nokia Siemens Network (ya lo intentaron sin éxito); recortar más puestos de trabajo; o, lo más drástico, vender la compañía entera.
Como apunta Forbes, los problemas a los que se enfrenta Nokia en la actualidad son similares a los que tiene RIM, para quien se barajan también opciones similares. Ambas, además, comparten otro rasgo común: el de haber sido reinas en algún momento en el mercado de los teléfonos móviles, pero no haber sabido adaptarse a los rápidos cambios por los que se ha visto afectado el sector.