Open AI, demandada por dos autores, quienes aseguran que ChatGPT se entrenó con sus textos
El autor de ciencia ficción y terror Paul Tremblay y la novelista Mona Awad han interpuesto una demanda por derechos de autor contra la compañía.
Open AI, la compañía creadora de la inteligencia artificial generativa de texto ChatGPT, continúa acumulando problemas. Ya son varios frentes, quienes la acusan de haberse servido de sus contenidos para entrenar sus tecnologías.
Hace unos días la compañía de Sam Altman recibió una demanda colectiva por apropiarse de datos personales obtenidos sin autorización. Los demandantes aseguran que “recolectaron sistemáticamente 300.000 millones de palabras de internet, libros, artículos, sitios web y publicaciones, incluyendo la información personal obtenida sin consentimiento”.
Los demandantes esperan ir a juicio y piden una compensación por daños y perjuicios que podría rebasar los 3.000 millones de dólares.
Ahora, dos autores literarios también han hecho lo propio. Han demandado a la compañía por haberse servido de sus obras de ficción para entrenar el aprendizaje automático que sustenta la IA del chatbot “sin consentimiento, sin crédito y sin compensación”.
Se trata del escritor de ciencia ficción y terror Paul Tremblay y la novelista Mona Awad, quienes han interpuesto una demanda en la corte federal de San Francisco. Su intención es que su caso se convierta también en una demanda colectiva.
Nutriéndose de descargas ilegales
Para más inri, los literatos señalan en su presentación que OpenAI podría haber usado sus textos para presentar GPT-3 (el modelo de lenguaje que impulsa el chatbot), obteniendo el material de ‘bibliotecas en la sombra’ que se nutren de descargas de torrents para publicar ilegalmente obras con derechos de autor.
“Estas bibliotecas en la sombra flagrantemente ilegales han sido de interés para la comunidad de capacitación en IA durante mucho tiempo”, alegan, según informe Reuters.
Por ahora, desde Open AI no se han pronunciado con respecto a esta nueva demanda.